Tuesday, November 27, 2007

Encuentro de Coordinadores de la RIA Zona Sur


Antes de empezar, quiero pedir disculpas por no acutalizar este blog en CASI UN MES! Por ello, daranme disculpando (notese el lexico Ecuatoriano que ya se me está pegando). Pues los primeros días de este mes (2 al 4 de noviembre) se llevó a cabo el IV Encuentro de Cordinadores de la RIA zona Sur en Guayaquil, Ecuador. Estuvimos en una casa de retiros Santo Domingo de Guzmán que está en la salida de Guayaquil a Playas.

Estuvimos ahí (me incluyo porque fui de lacayo, achichincle, siervo o como quieran llamarme) unos 60 varones buscando la voluntad de Dios para esta subregión. Los días estuvieron llenos de actividades, hubo un buen tiempo de oración, presentaciones de lo que el Señor ha estado haciendo en las comunidades de la zona (Bogotá, Cali, Cuenca, Guayaquil y Quito). Hubo una buena junta de los coordinadores mayores, que creo fue la mayor riqueza del encuentro. También hubo una excelente oportunidad para convivir, conocernos, saber más de lo que Dios está haciendo en Sudamérica en cuanto a lo que la Espada del Espíritu se refiere.

Además de los tiempos de oración, ponencias, etc. tuvimos tiempo para compartir y convivir, en la casa nos dieron de comer de todo, tuvimos por ejemplo encebollado (caldo de pescado), bolones de verde, guaguas de pan con colada morada, sopas de todo, etc, y algunos cerramos con una cangrejada. Adicionalmente en las noches tuvimos unas fiestas, en la primera, tuvimos una cena preparada delciosamente por las esposas de nuestros anfitriones, muchas gracias queridas hermanas por su servicio. Dejenme resaltar que de postre hubo una gelatina de menta con un baño de chocolate, estuvo DELICIOSO!

La segunda noche nos llevaron a dar un paseo por el río Guayas en un barco tipo Goleta llamado Henry Morgan. Ahí estuvimos platicando, bailando, etc. Fue un compartir muy bueno, todos estuvimos muy entretenidos ahí. La vista de Guayaquil desde el río está increíble. Un evento muy revelante fue un "accidente" que tuvimos, ya que cuando el barco regresó al muelle todos los pasajeros fuimos saliendo del barco, nosotros estábamos en la cubierta superior, y al bajar, ¡Zas! se resbala mi esposa en los escalones y cae de sentón un par de ellos. En eso, un hermano que llamaremos "Neto" que ya estaba en el muelle la vió resbalarse, se acercó al barco para preguntar si estaba mi esposa bien, voltié a verle (pues gritó) y pude ver cómo, al irse él acercando al barco, se le acaba el piso del muelle y ¡Splash! cae al río Guayas. Fue sorprendente cómo se hundió en el agua y aún más sorprendente cómo el personal del barco reaccionó y lo sacaron. Como la corriente del Guayas es fuerte, en el instante en que sumergió Neto, uno de ellos lo agarró del cabello mientras los otros ayudaban a sacarle. Gracias a Dios no fui yo, de lo contrario, ¿de donde me agarran? De las orejas yo creo. Después del susto la risa nos ganó y él se llevó la noche.

En fin, el Encuentro estuvo muy bendecido, han salido muchas tareas de ahí, quizá algunos contactos con comunidades prospectos. Sólo Dios sabe y a él nos aferramos como pueblo de su propiedad. Les mando un abrazo a todos los hermanos que asistieron, y le pido al Señor una unción especial en este servicio que están prestando en sus comunidades. A Él sea el honor y la gloria por siempre.

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